Ya
En el más profundo silencio podría llorar sin que
nadie me escuche. En medio de una inminente soledad podría reír sin que nadie
lo note.

Realizar todo lo que siempre quise, sin temerte; gritar
lo que anhelo y golpear la pared hasta ver mis nudillos sangrar. Ya nada puede hacerme mal, ahora que no estás.
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