Un centavo.
Las dos caras de una misma moneda, el secreto que
nace del pasado termina en presente y devela lo que se creía perdido, olvidado.
Con fuerza de tornado, intento destruir, encontrar, hacerme notar. ¿Acaso no
puedes verme? ¿Necesitas un poco más?
Con destreza pretendo encontrar la verdad, pero
una vez más se escapa de mí, siembra intriga y comienzo a maquinar, no puedo
parar, no debo hacerlo hasta encontrarme con la cruda realidad.
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