El Final.


Una hoja en blanco y  mil cosas por decir. Todo se vuelve nada cuando uno no sabe qué hacer.
Un nudo en la garganta, tratando todo el tiempo de no llorar. La convicción esta vez es total, imposible doblegarla, detuvo la sangre que corría por mis venas, calló esa voz que imploraba continuar.
Ya no tengo fuerzas, el tiempo se ha acabado, inevitablemente es el final.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Vueltas

Autodestrucción Garantizada